ÉXODO 2:1-8
ÉXODO 2:1-8 RV2020
Un hombre de la familia de Leví tomó por mujer a una hija de Leví, la cual concibió y dio a luz un hijo. Al ver que era hermoso, lo tuvo escondido durante tres meses. Pero como no pudo ocultarlo más tiempo, tomó una canasta, la calafateó con asfalto y brea, colocó en ella al niño y la puso entre los juncos a la orilla del río. Y una hermana suya se apostó a lo lejos para ver qué le sucedía. La hija de Faraón descendió a lavarse al río y, mientras sus doncellas se paseaban por la ribera del río, vio ella la canasta entre los juncos y envió una criada suya para que la recogiera. Cuando la abrió, vio al niño, que estaba llorando. Llena de compasión por él, exclamó: —¡Este es un niño de los hebreos! Entonces, la hermana del niño dijo a la hija de Faraón: —¿Quieres que llame a una nodriza de las hebreas para que te críe a este niño? —Ve —respondió la hija de Faraón. La joven fue y llamó a la madre del niño