2 REYES 21:1-9
2 REYES 21:1-9 BLP
Manasés tenía doce años cuando comenzó a reinar, y reinó en Jerusalén durante cincuenta y cinco años. Su madre se llamaba Jefsibá. Manasés ofendió al Señor imitando las perversiones de los pueblos que el Señor había expulsado ante los israelitas. Reconstruyó los santuarios de los altos que su padre Ezequías había destruido, levantó altares a Baal, erigió una columna como la de Ajab, el rey de Israel, y adoró y dio culto a todos los astros del cielo. Construyó altares en el Templo del que el Señor había dicho: «En Jerusalén se invocará mi nombre». Levantó altares a todos los astros del cielo en los dos patios del Templo. Quemó a su hijo en sacrificio, practicó el espiritismo y la brujería, instituyó nigromantes y adivinos y ofendió tanto al Señor, que provocó su indignación. Hizo una estatua de Asera y la colocó en el Templo sobre el que el Señor había dicho a David y a su hijo Salomón: «En este Templo y en Jerusalén, mi ciudad elegida entre todas las tribus de Israel, residirá mi nombre por siempre. No volveré a dejar que Israel ande errante, lejos de la tierra que di a sus antepasados, con tal que cumplan y se comporten conforme a todo lo que les he mandado, y conforme a la ley que les dio Moisés, mi servidor». Pero no hicieron caso, y Manasés los indujo a portarse peor que las naciones que el Señor había aniquilado ante los israelitas.