Quien Dices Que Soy – Parte 1 Beispiel

Todos hemos tenido momentos en los que nos sentimos abrumados y solos. Podríamos estar rodeados de gente y seguir sintiéndonos solos. La buena noticia es que no estamos solos. Dios nos encuentra justo donde estamos. No hay ningún lugar físico al que podamos ir donde Dios no pueda alcanzarnos, y lo mismo ocurre con nuestros sentimientos. No importa dónde estemos, cómo nos sintamos, Dios está ahí con nosotros. Él nunca nos dejará ni nos abandonará. Nunca se dará por vencido con nosotros. Ningún sentimiento es demasiado grande para que Dios no lo pueda manejar. Dios prometió que nunca nos dejará y no hay ningún lugar al que podamos ir donde Dios no esté allí.

Josué estaba rodeado de gente, de hecho, la Biblia dice que había más de 600.000 israelitas en camino a entrar a la tierra prometida, pero Josué aún tuvo la oportunidad de sentirse desanimado y perder la esperanza. Dios le dijo a Josué: "Sé fuerte, valiente, no temas. Nunca te dejaré ni te desampararé".

La misma promesa es nuestra hoy. Cuando Jesús ascendió al Cielo, prometió enviar un ayudante que estaría con nosotros siempre, el Espíritu Santo. No importa qué desafío enfrentemos, o cuán solos podamos sentirnos, el Espíritu Santo está ahí para ayudarnos.

Es posible que a veces te sientas solo. Es en esos momentos en que podemos recordarnos a nosotros mismos que Dios está con nosotros y declarar sobre tu vida: “No estoy solo”.