"FIN DE LAS DIFICULTADES"

La imagen dice:
¡CONFÍA!
DIOS abrirá una puerta
que le pondrá FIN
A TUS DÍAS DIFÍCILES.

¿Qué puerta está esperando y orando para que Dios la abra? Comenzamos con una promesa en el texto de la imagen que le comparto hoy: Dios abrirá una puerta que le pondrá fin a sus días difíciles. Gloria a Dios. Espérela con fe y paz; aunque es fácil aconsejarlo, pero no lograrlo fácilmente en medio de las pruebas.
Quizás, usted como yo, tiene personas que lo estén apoyando en oración por eso, fielmente, cada día, en todo momento; atentos a las noticias que usted les de... Pero mientas...
Habrá momentos en medio de todo eso, que a veces no sentirá la Presencia de Dios en usted, por el mismo agotamiento; pero el Señor siempre está y observa la manera en que usted está reaccionando; su fe quizás ha decaído; se siente impaciente en que por fin esa puerta se abra y poder gozarse y alegrarse en el Señor por haberle respondido.
Pero Dios, su Padre Celestial, espera que siempre prevalezca la fe, ante la demora en llegar su bendición, que sin duda llegará.
Dice la Biblia, la Palabra de Dios en Isaías 41.13: "Porque yo, el Señor tu Dios, te he tomado de la mano; yo te he dicho: “No tengas miedo, yo te ayudo”»
Y aún en medio de su lucha, quizás declarar lo que dice en Salmos 121:1-2: "Al contemplar las montañas me pregunto: «¿De dónde vendrá mi ayuda?» Mi ayuda vendrá del Señor, creador del cielo y de la tierra".
Así alegrará el corazón de Dios y Él sigue obrando, hasta que llegue el momento en que usted reciba lo que espera; pero el momento oportuno, solo Jesús lo conoce; por eso confiar en Él, es lo que le dará la fortaleza para soportar en medio de esa necesidad.
Dice en Romanos 10:11: «Dios no deja en vergüenza a los que confían en él».
Estuve pensando en eso estos días; pensaba que no sería grato ni para usted, ni para Jesús; que usted sea avergonzado, por haber declarado su fe con todas sus fuerzas; sin dejar de orar nunca y que de pronto le pregunten si recibió su milagro y usted le conteste a los que lo conocen: No, no llegó a tiempo.
Dios es Todopoderoso, pero la única manera de no responderle, a usted y a los que oran por usted; sería si realmente no tuviera Poder. Pero gracias a Dios no es así.
Dice en la Biblia en Jeremías 32:27: "«Yo soy el Señor, el Dios de todo ser viviente. Nada hay imposible para mí".
Entonces, como dice la Biblia, si nosotros siendo malos no dejaríamos de ayudar a nuestros hijos ¿Cuánto más Dios jamás haría oídos sordos a nuestros pedidos, teniendo Todo el Poder para hacerlo?
Como lo dice en la Biblia, en Mateo 7:11: "Pues si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más su Padre que está en el cielo dará cosas buenas a quienes se las pidan!"
Confíe; pronto contará su testimonio con una sonrisa enorme, reconociéndole al Señor, Toda la Gloria, toda la Honra y Toda la Alabanza, por ese milagro que tanto está esperando y ocurrió.
Prepárese a recibirlo, no deje de orar, de adorar y alabar a Jesús y de leer su Palabra; porque como dice en Lucas 1:37: "Nada hay imposible para Dios".
Oremos.
Señor Jesús, te damos gracias por estar
siempre a nuestro lado.
Perdónanos, cuando actuamos con impaciencia,
pero dentro de nuestro corazón,
sabemos que nunca nos dejarás solos,
que siempre tienes una salida,
para cada situación que vivimos.
Hoy te volvemos a entregar el control,
solo a Tí, orando y esperando con fe.
Padre celestial, nada hay imposible para Tí
y nos Amas Tanto, que pudiendo ayudarnos,
¿Cómo nos dejarías solos?
Ya te damos gracias por adelantado,
por lo que vas a estar y estás preparando,
para sorprendernos.
Te amamos Jesús. Amén.

"No los voy a dejar huérfanos;
volveré para estar con ustedes.
Dentro de poco, los que son del mundo
ya no me verán; pero ustedes me verán
y vivirán porque yo vivo.
En aquel día, ustedes se darán cuenta
de que yo estoy en mi Padre
y ustedes están en mí y yo en ustedes".
Juan 14:18-20

"El Señor es mi luz y mi salvación,
¿de quién podré tener miedo?
El Señor defiende mi vida,
¿a quién habré de temer?
Los malvados, mis enemigos,
se juntan para atacarme y destruirme;
pero ellos son los que tropiezan y caen.
Aunque un ejército me rodee,
mi corazón no tendrá miedo;
aunque se preparen para atacarme,
yo permaneceré tranquilo.
Sólo una cosa he pedido al Señor,
sólo una cosa deseo:
estar en el templo del Señor
todos los días de mi vida,
para adorarlo en su templo
y contemplar su hermosura".
Salmos 27:1-4.