Vida Abundante Coronado

· ¿Qué es exactamente la envidia? (Academia) Es una conciencia dolorosa y resentida de una ventaja que otro disfruta, acompañada de un fuerte deseo de poseer la misma ventaja. La envidia quiere tener lo que otro posee.

· La envidia es una especie de incredulidad. Dios esté actuando de manera justa conmigo.

· Alguien obtuvo una ventaja, mérito o premio y yo la quiero para mí. (insana)

· No sólo quiero aquello para mí, sino no que deseo y me alegro de su mal.

· Impío: Ni tiene, ni quiere tener una relación con Dios.

· No existe la “envidia de la buena”. La envidia es sentirse mal, porque otro tiene bien.

· Sin sentido de eternidad. Esto es lo que más me acerca a lo salvaje.

· Describe a alguien que vive en un metro cuadrado. Incapaz de ver hacia adelante. (arriba)

· Insistió en la absurda comparación. Sal.73:4-12

· Asaf permitió que una escala de valores humana lo sedujera; podríamos parafrasear este salmo así: ”No puede ser que yo sirva a Dios y las cosas no me salgan tan bien como a los malos”. Lo invadió la confusión y él desanimo.

· La envidia afecta la perspectiva y nos ponemos exagerados. Afecta la razón.

· Ni al más rico, guapo, fuerte, etc. todo le sale bien.

· Se enfermo de Amargura. Sal.73:21 se me afligía el corazón y se me amargaba el ánimo.

· El sentido de eternidad, que otorga una espiritualidad saludable, lo cambia todo.

· Pro.14:30 El corazón tranquilo da vida al cuerpo, pero la envidia carcome los huesos.

· Debo entender que soy una pieza exclusiva en el rompecabezas de Dios. Sólo yo tengo la forma, el tamaño, que Dios determinó que en su proyecto.

· El santuario en el AT era el Lugar Santísimo. En el NT gracias a Cristo, cualquier lugar, momento y persona.

· La Palabra. Sal.73:24 Me guías según tu consejo…

· Pedro pregunta por Juan. La respuesta de Jesús fue lo que es de él es de él, lo que es tuyo es tuyo.

· En el santuario entiendo lo que no se entiende.

· Diferencie entre lo temporal y lo eterno.

· Sal.73:25 ¿A quién tengo en el cielo sino a ti? Si estoy contigo, ya nada quiero en la tierra. 26 Podrán desfallecer mi cuerpo y mi espíritu, pero Dios fortalece mi corazón; él es mi herencia eterna.

· Debo decidir cambiar la duda en certeza.

· Nunca debo cambiar lo que siento, por lo que sé.

· Determine sus bendiciones y agradézcalas.

· Sal.73:28 Para mí el bien es estar cerca de Dios. He hecho del Señor Soberano mi refugio para contar todas sus obras.

· Aprenda a ser agradecido, por quien soy y por lo que tengo.

· Reaccione acorde a cada circunstancia.

· Celebre las bendiciones de otros. En ocasiones sólo en primera y con la “chancha”.

· Transforme la sensación de envidia en admiración, respeto y desafío.

· Dolor por el dolor. Sal.73:19 ¡En un instante serán destruidos, totalmente consumidos por el terror!

· Reaccione con compasión cuando corresponda.

· Cuando me alegro por los triunfos ajenos, Dios me puede llevar por el sendero del triunfo.

Conclusión

· El amor verdadero se deja de comparar.

· Las Batallas duras, generan triunfos poderosos.

· Me están observando. “A la generación de tus hijos engañaría”.